miércoles, 25 de abril de 2018

En marcha:
El derecho de tod@s, y el rescate de la Universidad Pública.
En procura de la Paz Social.

miguel angel herrera zgaib
profesor asociado, ex director de C. Política, Unijus. UNAL
Ex rector U. Libre de Colombia.

Los estudiantes organizados en el ENEES, el Encuentro Nacional de Estudiantes de la Educación Superior de Colombia, invitan al conjunto de las organizaciones hermanas, y, por supuesto, a la comunidad universitaria toda, a ser parte de la movilización de hoy día, miércoles de alegría.

Movilizados por un programa de reivindicaciones que no han sido satisfechas, y que prueban a contravía, que el lema de hacer del país el primero en materia educativa del continente, es un objetivo que se niega en la práctica gubernamental conocida.

El estado ruinoso de la Nacho, que se descubre a simple vista con caminarla y visitarla, en el campus de la lechuza en Bogotá, se prueba sin dificultad. Basta con caminar las escalinatas que nos dan acceso a la Facultad de Derecho y Ciencia Política que "lucen" como un mosco en leche el contraste con la plazoleta recien inaugurada, a la cual se accede con un carreteable que cada vez se va pareciendo más a un camino de herradura para peatones y automotores. Hasta convertirse hoy en un incómodo aparcadero, "decorado" con zanjas en las que se empoza el agua.

De otra parte, las nuevas obras y las renovaciones conocidas, en particular, el edificio "inteligente" que honra a un faraón en desgracia relativa de la construcción, tiene una biblioteca despedidora, porque no está preparada para resguardar a sus visitantes de las inclemencias del clima. Bastaría con que el benefactor, Luis Carlos, y el rector saliente, Ignacio, se quedaran después de las 6 pm., en sus instalaciones para descubrir que arquitecto y diseñador se "pifiaron", y conviene decirlo e insistir en ello.

De otra parte, el moderno edificio de Enfermería se construyó, pensando en el futurismo de Blade Runner, cuando el juvenil Harrison Ford, de hace más de medio siglo, recorría el monstruo de ciudad que es "Los Angeles", en una nave que omitía vías terrestres y carreteables como el de la Nacho. Por lo cual no necesitó de pensar en parqueaderos terrestres, sino helipuertos por construir. A lo que cada quien, profesores y visitantes tienen que adornar las vías de acceso, taponando por necesidad las aceras.

Lo dicho es la prueba del desastre en materia de planeación, mantenimiento y organización del espacio público, en la que se autodefine con orgullo como la "mejor universidad del país".

Por lo ya dicho, sin entrar en el almendrón del problema, la ausencia de financiación adecuada, por una parte, de autonomía real, por la otra; y la urgencia de transformar la parte académica, esto es lo contenidos y prácticas de la enseñanza y la investigación, para darle respuesta adecuada a las paces que llegan con el posconflicto, hace de nuevo, de los estudiantes, como lo cantó Mercedes, "la tucumana", el jardín de nuestra alegría, aunque éste se torne cada vez más escaso a la vista de sus habitantes consuetudinarios, nosotros.

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