viernes, 31 de mayo de 2019



FRAUDE A LA JUSTICIA, FALSOS POSITIVOS
Y NUEVO “ACUERDO” NACIONAL.
Miguel Ángel Herrera Zgaib
“La honorabilidad de los miembros de la Fuerza Pública debe ser preservada y no puede ser satanizada.” Presidente Iván Duque, 18/05/19.
“Estas prácticas sugieren que el actual Ejército y @mindefensa no han aprendido nada de uno de los capítulos más oscuros de la historia de Colombia –el de los falsos positivos.” José Miguel Vivanco, HRW, en ET, 19/05/19.

                                                  En las dos últimas semanas de mayo, la realidad política colombiana entró en un aparente déjà vu, al confrontar el país político el cumplimiento de los acuerdos de paz, firmados en el teatro Colón, con el comandante de las Farc-Ep, Rodrigo Londoño, valiéndose la elite política reaccionaria gobernante de todo tipo de estratagemas jurídicas y políticas.

El bloque reaccionario tiene como palafrenero y capataz al presidente Duque y al difamador senador Álvaro Uribe apoyado por los corifeos del Centro Democrático en el Congreso, donde no son mayoría. Estos son los más notorios artífices de la tragicomedia nacional.

Preparando la caída

                                                   Bajo los conjuros de un anti Tiresias tropical, el ex Néstor Humberto Martínez, atrincherado en las catacumbas de la fiscalía general, con el resguardo de sus más de 15.000 operadores, confrontó en forma directa, sin cuartel, la aplicación efectiva de la Justicia Especial de Paz que hará posible la senda de reconciliación entre víctimas y victimarios.

El trompo de poner del exfiscal, el CD y sus aliados, ha sido la acusación contra Jesús Santrich.  Un “hecho” fabricado con inusitada laboriosidad y perversión con la DEA como aliada principal, como que movilizó a dos agentes encubiertos, mexicano- americanos, quienes entraron a Colombia sin identificarse.

Dizque venían a negociar con el excomandante guerrillero, mediados por el “influenciador” Marlon Marín, hoy cobijado por las mismas autoridades estadounidenses, porque en verdad era un tercer informante, la compra de 10 toneladas de cocaína. Jesús, para sellar el negocio debía darles la pruebita de 5 kilos, y así encartar para siempre al más talentoso y radical ex integrante de la mesa negociadora de las Farc-Ep en La Habana.

Era la tramoya armada binacionalmente por el hijo del maestro Salustiano Tapias, un célebre comediante nacional, para torpedear la paz hundiéndola en su ejecución, interpelando al indigesto sentido común colombiano, mediante un nuevo “estado de opinión” asegurado por los medios de comunicación nacional oligopolizados, porque tanto la democracia como la izquierda están huérfanos de medios propios de amplio y eficaz cubrimiento desde los tiempos de la difunta Alternativa.

Denuncia internacional

La encubridora magia mediática ofrece en vivo y en directo, sin la interlocución del casi ciego comandante guerrillero, en el altar sacrificial del escarnio público a un chivo expiatorio de la paz rechazada y mancillada. A quien después de un año de incomunicación en La Picota, nadie escuchó hasta ahora. En ese atronador silencio circula el placebo de la democracia espectáculo que acostumbra la caterva de leguleyos y rábulas bien pagos que trae y lleva las leyes de la república a su acomodo.

Pero este primer acto, en contra de la paz neoliberal ya pactada y sancionada, vino enseguida acompañado de la liquidación de un rosario sangriento de líderes de la Farc asesinados por operadores anónimos. La reacción parapresidencial la selló la ejecución extrajudicial de un militante por el ejército en el Magdalena medio.

Este crimen de estado encendió la alarma internacional contra la epidemia de los falsos positivos, en la opinión estadounidense, en primer lugar, a través de la corresponsalía del New York Times, y luego mediante la declaración de un significativo número de congresistas demócratas que reclaman el respeto a los DDHH, y el cumplimiento de los acuerdos de paz en Colombia.

Conejo a la Justicia

“La extradición es efectiva en la medida en que se reconozcan las decisiones judiciales de un Estado…Poner en entredicho su validez es el inicio del fin de la extradición como un instrumento fundamental en la lucha contra el crimen organizado.” Procuraduría general, en ET, 19/05/2019, 1.2.

                                                      Hace un año, que el Tiresias criollo, Jesús Santrich está en la cárcel La Picota, por cuenta del indictment presentado y acordado por el gobierno estadounidense durante la Fiscalía de Néstor Humberto. Para pescar en el río revuelto de la paz, mediante la afirmación sin pruebas, que el exguerrillero estaba incurso en tráfico de drogas con posterioridad a la firma del acuerdo del Colón, el 1o. de diciembre de 2016.

El indictment (la sindicación) lo autoriza un acuerdo administrativo de cooperación judicial binacional para el ejercicio express de la extradición, que permite trasladar en un santiamén a nacionales para ser juzgados en las cortes estadounidenses.

Este caso se llevaría ante una corte de New York, que enjuiciaría desembuchando las pruebas,” al “narcotraficante” de la Farc, cuya conducta supuestamente delictuosa ocurrió en Colombia, ante un gran jurado de extranjeros que no hablan castellano. Algo parecido a una ordalía cristiana en los tiempos de la inquisición colonial imperial española.

Conviene recordar que está acción administrativa no la respalda ninguna ley de extradición, sino que invoca la extradición, que luego de prohibida en el artículo 35 de la Constitución de 1991, la reincorporó una reforma constitucional express, “patinada” por el expresidente Ernesto Samper sin visa a raíz de la descertificación estadounidense.

Entonces él inició la entrega de los hermanos Rodríguez Orejuela, para congraciarse con el imperio vengador, y de paso, literalmente, “taparle la boca” a los financiadores de elecciones, hasta el solo de los venados. Asistíamos así a los comienzos del régimen para-presidencial por interpuesta persona. El modelo se cocinaba en la gobernación del Departamento de Antioquia, y su genealogía la trazó con elocuencia cuasi-suicida el congresista Gustavo Petro.

Ante el fallo de la sala de revisión de la JEP, instrumento de la justicia transicional, el ministerio público que lidera el procurador Carrillo, uno de los impulsores años atrás de la 7ª papeleta, a raíz del asesinato de Luis Carlos Galán, apela lo decidido en favor de Santrich, valiéndose de una nueva prueba, un video de 7 minutos hecho a su gusto por Marlon Marín, sobrino de Iván Márquez, informante de la DEA.

El decir de la Procuraduría no repara en los hechos que prueban la conducta delictiva atribuida a Santrich, que la JEP tuvo que revisar con los instrumentos a su alcance, para determinar si la conducta ocurrió después del 1o. de diciembre. No sirven los argumentos jurídicos solos, pero, en todo caso, la Procuraduría apeló el lunes 20/05719.

En cambio, se presenta un argumento de autoridad, que no tiene validez para la justicia transicional: “Tenemos argumentos jurídicos bastante sólidos…La extradición es efectiva en la medida en que se reconozcan las decisiones judiciales de un Estado.”

La garantía de los exguerrilleros desarmados

No me vengan con leguleyadas”. Palabras de reproche del procónsul estadounidense
 Kevin Whitaker contra el representante López de Cambio Radical, durante el desayuno de abril 2.
“La sentencia “demuestra” que los acuerdos con las Farc crearon un cogobierno con el narcotráfico.” El Centro Democrático, CD.
“El acuerdo de paz ya llevó a este tribunal al límite de los beneficios que puede conceder.” Procuraduría general.
                                                       Para hacer la dejación de armas, con el antecedente de la paz con el M19, que Antonio Navarro cada vez que puede recuerda, - nunca hubo “entrega” de las mismas -, las extintas Farc-Ep elaboraron, en discusión primero con el gobierno, la justicia para transitar de la guerra a la paz.

Es el fruto de la discordia con las fuerzas coaligadas de la reacción y la derecha conservadora, que no quieren justicia sino venganza contra “sus enemigos,” a quienes quisieron liquidar en la guerra lanzada durante los dos gobiernos de Uribe Vélez.

Para hacer la paz, después de 52 años en armas, la comandancia de las Farc-Ep se asesoró de la mejor manera. Incorporó al equipo de La Habana al jurista español, Enrique Santiago, comunista, diputado electo por Unidas Podemos, y secretario de su partido; y al hijo de Jorge Leyva Urdaneta, ―laureanista disidente del Frente Nacional, candidato presidencial en 1958 y 62―, el conservador Álvaro Leyva Durán.

Álvaro, confidente del sacrificado Gómez Hurtado, se inmiscuyó en procesos de paz con Belisario Betancur, y luego con Andrés Pastrana al negociar con las Farc en el Caguán. Para salvar su vida, se exilió en Costa Rica, entre los años 1998 y 2006.

Con la rejilla de las garantías, para prevenir extradiciones sin fundamento conocido como las de Sonia y Simón Trinidad, la guerrilla desarmada, con los fierros convertidos en piso del anti monumento de Doris Salcedo, la supuesta actuación criminal de Santrich tenía que pasar el filtro de la JEP.

 La comisión de revisión, con una votación 3 a 2, dictaminó que no hubo prueba del hecho que Santrich incurriera en conducta susceptible de extradición. Ahora de la apelación conocerán los magistrados Linares, Gamboa, Rojas, Cifuentes y Arango.

En el ínterin el presunto sindicado intentó suicidarse, cortándose las venas, en la celda de la Picota. Pudo ser atendido con prontitud, luego que Santrich, recluido un año, supo que su libertad sería impedida de nuevo, por un dispositivo montado por la Fiscalía con la expedición de una orden de recaptura avalada por una juez que desestimó el argumento de su defensa de no ser competente, al ser Santrich congresista a raíz de lo pactado en los acuerdos de paz.

Se va el caimán, y torrente de “pruebas”

Pues ya están las 7.000 has aquí, en un mes. Y las otras 3.000 has, en un mes y una semana más (…) Dice Marín a los dos agentes encubiertos en el video recién filtrado a la opinión pública por desconocidos.

                                    El “inesperado” resultado de libertad para el guerrillero de las Farc-Ep fue contestado por la renuncia irrevocable del Fiscal general, quien fuera interlocutor directo de los acuerdos de La Habana. 

Luego Néstor Humberto, el caimán de los Andes, cerebro descubierto de la continuación de la guerra por otros medios; prolongó el asedio a la paz mediante el memorando de 6 objeciones, repetidas por el presidente Duque alegando conveniencia; y así no firmar la reglamentación de la JEP, luego de las marrullas de Ernesto Macías, presidente del Congreso.

Antes, dos magistrados que no desayunaron con el procónsul Kevin Whitaker, fueron “tallados” con la supresión de sus visas, Antonio José Lizarazo, ponente del fallo de exequibilidad; y Diana Fajardo, compañera de Corte. La táctica de los desayunos se destapó por los representantes López de Cambio Radical, y David Racero de Colombia Humana, el 2 de abril.

A “fundamentar” las objeciones presidenciales dedicó los días el fiscal renunciante, mientras de noche escribía cartas en defensa de Sarmiento Angulo frente al caso Odebrecht, según decir de Gustavo Petro. La embajada de Estados Unidos, en cabeza del procónsul Whitaker, continuaba un afanoso y puntilloso lobby institucional.

Antes, el 1o. de abril, los senadores en el desayunadero Whitaker, con la excepción de Iván Marulanda, le hacían la voz segunda. Él pensó que no la tendría “fácil” con la cámara baja, donde la correlación de fuerzas es desfavorable a la reacción y la derecha conservadora sumada con algunos “independientes”.

Con posterioridad, se supo que a tres magistrados les habían retirado la visa previamente. El primero, Antonio José Lizarazo, ponente en la Corte Constitucional del fallo de exequibilidad de la JEP, se acercó a los servicios consulares, y recuperó su visa.Una vez “visitaron” la sesión consular, a dos de los tres les restituyeron el paso a la sede imperial. Sin embargo, hubo un tercer magistrado, Eyder Patiño, presidente de la sala penal de la Corte Suprema, quien no aceptó se quedó sin visa.

 La punta del iceberg

“Es pretencioso decirlo así. Pero dado que tengo el privilegio de mantener diálogo con todos los sectores de la vida nacional, puedo servir de puente entre ellos”... Entrevista de Néstor Humberto Martínez con Yamid Amat, en ET, 19/05/19, p. 17.7.
“91 excombatientes y 26 familiares de las Farc asesinados entre 24/11/16 y 23/04/2019, reporta la Fundación Paz& Reconciliación, mientras que las Farc reporta 131 asesinatos de guerrilleros con última fecha 14/05/2019.

                                              La extradición de Santrich es el chivo expiatorio para desacreditar la JEP, y así cumplir de carambola las “promesas” hechas por Iván Duque. El exfiscal Martínez es el alfil jurídico de esta maniobra, y cobrará caro, mientras lo anuncia con cinismo:
 “No estoy en el proselitismo político y hoy mucho menos. No tengo ambiciones de esa naturaleza.”

Sin embargo, otra cosa piensan las fuerzas de la oposición, y observadores neutrales, su fiscalía ha sido la más politizada de todas. En goce pleno de la renuncia orquestada con el bloque reaccionario, corrobora a Yamid Amat la estrategia en la disputa hegemónica de la sociedad civil: “Es curioso: uno habla con todos los sectores y todos dicen “queremos la paz”. Bueno, empecemos por la paz política para que la institucionalidad de la paz funcione” (ET, 19/05/19, 1.6).

Este decir, ¡qué duda deja! El señor Martínez no solo quiere escabullirse de las trapisondas que armó por interpuesta persona, en defensa de Odebrecht, sino que da los primeros pasos como primer aspirante a la candidatura presidencial.

Él quiere asegurar su puesto en la sucesión, a través de un “nuevo” acuerdo nacional, que parecía fracasar en el primer convite a manteles con el presidente Iván Duque.

Para que avance, el nuevo acuerdo nacional, este Frente Nacional tiene que sellar la Pax romana, es decir, pasar de la paz neoliberal impuesta por Juan Manuel Santos a la guerrilla,―a cambio de justicia transicional y curules ―, a la paz reaccionaria, pretextando que el bloque reaccionario derrotó en el plebiscito por algo más de 42.000 votos, sin contar la abstención superior al total de votos emitidos.

Oficios de la Oposición en el casino global

                                    Por fin, tenemos a una oposición variopinta, que no atiende los dictados del bipartidismo. Este es, sin embargo, el tiempo de la degeneración democrática, de la de-democratización, que estudiara el último Paul Tillich, cuando fijó su atención en las democracias populares del este, luego del derrumbe del llamado bloque soviético, a partir de 1989.
En Colombia, con la oposición viva, con los resultados de Gustavo Petro y Colombia Humana, sin registro electoral, una población ciudadana heterogénea, convencida de la paz que elimine los privilegios, para cumplir el art. 13 sobre la igualdad real y efectiva, el desafío es mayúsculo, frente al anunciado fracaso del posconflicto convertido en un haz de burlas del presidente Duque para abajo.

Ahora, entre la exguerrilla de Farc, se cruzaron cartas Iván Márquez y Timochenko, el primero arrepentido de haber entregado las armas, y el segundo haciéndole una requisitoria, a la cabeza de las negociaciones en La Habana. Entre bambalinas le espetan en público la responsabilidad de su sobrino, Marlon Marín, el encubierto agente de la DEA, y contratista de la paz.

Él es protagonista del video con Santrich, donde hablan “en clave” de compra de televisores. La audiencia en privado es con los agentes encubiertos, mexicano-americanos, que pretextan después ser enviados por el capo Caro Quintero, y entregarle al Tiresias criollo un millonario pago en dólares por la entrega de 5 kilos de cocaína. Lo que afirma el mismo Marlon que se consumó aquel día.

Después de la espectacular revelación del nuevo video de siete minutos, de las presiones a Whitaker a la Corte Constitucional, ésta falla una tutela, con Lizarazo como ponente, que abre la caja de Pandora a la segunda instancia a procesos ya resueltos desde concejales para arriba, pasando por Andrés Felipe Arias, quien rehuyó a la justicia nacional como varios personajes del kínder reaccionario de Álvaro Uribe.

Puesto que no se establece un límite de tiempo, permitiría apelaciones hasta 1991, inclusive. El exmagistrado, Jaime Córdoba Triviño, hizo reparos, pero no al fondo de la sentencia, que aparece como “coima judicial” de gran calado.

¿Por qué?

Porque abrirá puertas a los terceros procesados y condenados por parapolítica, y los que tendrían que concurrir a la JEP, entre ellos, eventualmente, los hermanos Uribe Vélez. Quieren sembrar desde ya el camino de garantías para ser exculpados, si después de las indagaciones e investigaciones llegan hay sentencias condenatorias, y mayorías favorables en las Cortes.

Si prospera el recurso de apelación, el modelo presidencialista autoritario amplía la vida del régimen para-presidencial, que tampoco desmontó el gobierno del nobel de la paz. La respuesta de la oposición se juega en las calles y en las elecciones de octubre próximo. Una labor de intensa pedagogía política y de organización de los grupos y clases subalternos, para detener el quehacer reaccionario en el congreso, y ganar las elecciones locales y regionales donde es posible.

Por lo pronto, volverá a ser ponente Antonio José Lizarazo, objeto ya de presiones indebidas, por la embajada del procónsul Whitaker. Veremos, en muy corto tiempo para dónde va la justicia en materia de pesos y contrapesos. Porque seguimos en el tiempo de los “articulitos,” la judicialización de la política, y la vuelta a los “falsos positivos.”

Estos hechos fueron reconocidos y denunciados por el corresponsal de New York Times, y el consejo editorial del mismo diario con llamado urgente al gobierno Duque, que cae en popularidad al 32 por ciento. 

A la denuncia siguió la carta de 72 congresistas norteamericanos protestando contra la barbarie posconflicto, para juntar el horizonte local y global frente a predicamento de la paz y la guerra colombiana. Y a esto se sumó la columna de Daniel Coronell "Explicación Debida" en la revista Semana, que recordó cómo ésta tenía desde febrero de este año, los mismos documentos que sirvieron al corresponsal del NYT, para que en algo más de una semana, pusiera en cuestión la política pública de guerra de las FF AA. 

El gobierno de dientes para afuera dijo que rectificaría la política, y Coronell fue despedido sin explicaciones de la revista en la que estuvo cotribuyendo como columnista durante 14 años. Entre tanto, la promoción del general Nicacio Martínez sigue su marcha en las bancas del senado. A la vez que, después de 14 meses, Jesús Santrich recupera su libertad, y la posibilidad de ocupar su curul según lo decidido en el Consejo de Estado y en la Corte Suprema de Justicia. 

A su turno, el derrotado gobierno de Duque truena y el presidente se indigna en público ante el auditorio de industriales, en número superior a 500. Él repite que acata las decisiones de la justicia, pero, en cambio, de inmediato insiste en que continuará defendiendo la legalidad, y espeta contra su enemigo declarado, el excomandante guerrillero Santrich, que es un mafioso y debe ser extraditado.



viernes, 17 de mayo de 2019


POLLO OLÍMPICO Y DERRUMBES EN LA CARRETERA BOGOTÁ VILLAVICENCIO.

¿MANO A LA PRESA?

En el año 2009 se construyó la Granja de Pollo Olímpico, que según Coviandes, concesionaria de la vía y los túneles, a través del señor Alberto Mariño, influye en el derrumbe del túnel que está debajo de la Granja.

Él dice que es a partir de 2013 que empiezan los problemas, con el deslizamiento de los terrenos; y ello está conectado con la construcción de la Granja.

El señor Vásquez aclara que la Granja no produce ningún tipo de vertimiento de agua que se conecta con el túnel.

¿QUIÉN MIENTE?

El sitio es el Km 58. Él mismo habla que fueron utilizados explosivos en la construcción, aunque Coviandes dice que no lo hizo. Los derrumbes se han producido desde el año 2013.

Según Coviandes, el problema de los taludes y los derrumbes le corresponde al Ministerio de Vías. Pero, el viceministro señala que no, es un compromiso de la empresa privada mantener la transitabilidad de la vía.

En el contrato de 1994, sin embargo, el ministro no quedó pactado el cuidado de la montaña. Entonces Coviandes tiene razón.

Sigue el prejuicio para los usuarios, y el viceministro solo da disculpas, y señala que el arreglo culminará en 6 meses. Pero la vía tiene 50 años de haberse construido.



En Guayabetal no había afectación hasta ahora, sí en otros lugares. En últimas, el "problema no es del pollo (olímpico) sino de la cordillera. Pero, eso sí, los peajes que recolecta Coviandes, los más caros, sigue acumulándolos el beneficiario de la concesión.

Y claro, Avianca la empresa de Efromovich hace fiestas con los viajes a Villavicencio. Ya suben los costos a más de $ 1 millón de pesos. Y nada pasa. Las superintendencias del caso nada dicen para controlar la especulación. La empresa estatal Satena está casi borrada del mapa, porque siempre ha existido la intención de que desaparezca, en beneficio de los operadores privados.

sábado, 11 de mayo de 2019

S.O.S. ÉTICO Y POLÍTICO
ENTRE AYER Y HOY, DOS ASESINATOS MÁS REPORTADOS.

miguel angel herrera zgaib

La Fiscalía general dice que ya determinó, con eficacia investigativa, la relación de causalidad material de más de 150 asesinatos de líderes sociales y políticos de las regiones y municipios de Colombia.

Pero, ¿qué pasa con los ordenadores intelectuales de tales crímenes execrables?¿ Puras generalidades? No son pandillas de mozalbetes, y menores de edad los que constituyen el tinglado de todos estos crímenes.

El régimen parapresidencial se perpetúa

La Fiscalía de Humberto Martínez y las instituciones gubernamentales, con el presidente Iván Duque a la cabeza, tienen que informar a la ciudadanía sobre lo anterior, quiénes son los dirigentes intelectuales de esta "incontenible" orgía de sangre, y dar una garantía de que no habrá una muerte más, sin más eufemismos, excusas ni aplazamientos.

No más espera para desmontar el régimen parapresidencial que empezó a montarse, desde la gobernación de Antioquia, durante los años 90. Hace parte de lo que para entonces Boaventura de Sousa Santos, Mauricio García Villegas, y los escritores del Caleidoscopio de las Justicias caracterizaron de "fascismo social".

La génesis del Frankestein.

Pero, tales fueron las condiciones objetivas, que hicieron posible la emergencia en cuestión de pocos años del régimen parapresidencial colombiano. Es un régimen que se prolonga en el tiempo hasta nuestros días, cuando el antídoto principal, la paz con reformas, se encuentran bloqueado por la coalición reaccionaria y de derecha que gobierna el país.

Sí, Álvaro Gómez, sacrificado a las puertas de la Universidad Sergio Arboleda no se equivocó, se requiere un cambio de régimen. Pero, él mismo es una de las víctimas de un Frankeinstein que él mismo contribuyó a alimentar desde el Congreso con su oratoria incendiaria y vindicativa, en la década de los 40 durante el pasado siglo.

sábado, 4 de mayo de 2019

Algunos recuerdos…en Presente 

Giovanni Mora Lemus1 
30 de abril de 2019 

La memoria histórica se convierte en campo de disputa, como diría la estudiosa argentina Elizabeth Jelinen la conmemoración de las fechas in-felices2. Una de ellas es el 9 de abril, que recuerda el asesinato del líder liberal Jorge Eliecer Gaitán en 1948, pero además, el bogotazo, la insurrección popular; y luego, el desmadre que llevó a la violencia política liberal-conservadora como partera de la historia colombiana. Hoy, más de setenta años después, el Estado colombiano nos debe la verdad sobre todos estos hechos 

Desde hace algunos años el magnicidio de Gaitán ha servido de referente para volver a recordar a las víctimas de nuestro largo conflicto armado. Mujeres, hombres, niños que padecieron y aún padecen de distintas formas de violencia política, cuentan por lo menos con un día que rememora nuestra tragedia como país. La institucionalidad y la sociedad civil con sus movimientos sociales han empezado a nombrar este día como el de la memoria y la solidaridad con las víctimas.     

Asimismo, el mundo entero hizo memoria con la masacre de hace veinticinco años en Ruanda. Todo empezó un 6 de abril de 1994. Los Hutus casi exterminan a los Tutsis. El baño de sangre recorrió a ese país africano por varios meses, todo esto con la omisión de la comunidad internacional que miró para otro lado, mientras se desarrollaba el genocidio.    

Por su parte, desde México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) recordó, hace algunas semanas, el etnocidio de los pueblos indígenas a propósito de la conquista de América Latina hecha con la cruz y la espadaÉl exigió unas disculpas públicas a la corona española, por su responsabilidad histórica: 

 ¿Qué recordaría el actual monarca español, cuando supo del reclamo de AMLO? Seguramente Felipe V repetiría mentalmente la frase que su padre Juan Carlos I pronunció en la cumbre iberoamericana de jefes de Estado en 2007. Dirigida en su momento a Hugo Chávez: ¿por qué no te callas?  

Los acuerdos de la Habana- Teatro Colón 

Desde el 2016 hasta hoy, van cien asesinatos de excombatientes de la otrora guerrilla de las Farc, incluido un bebe de siete meses hijo de una pareja de militantes del actual partido político; La Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común. 

Por estos días muchos recordamos la extraordinaria obra titulada “Guadalupe años cincuenta,” estrenada en 1975, escrita y dirigida por Arturo Alape y el maestro Santiago García. La pieza teatral de hace más de cuarenta años, después de la entrega de las armas viene la persecución. En los años cincuenta fueron los desmovilizados de las guerrillas liberales fueron el blanco. Hoy los que cumplieron con su palabra y entregaron las armas de acuerdo a lo pactado.  

Pero mientras AMLO exigía excusas y el mundo rememoraba la Ruanda de los años noventa, vino el latigazo del presidente eterno. Harto de la minga social y de la movilización de los subalternos, el 7 de abril pasado escribió; si la autoridad, serena, firme y con criterio social implica una masacre es porque del otro lado hay violencia y terror más que protesta. No faltó quien tratara de justificar la frase, pero el mensaje pretendía demonizar y atacar con violencia simbólica la protesta social.       
   
Pero hubo más. 

Unos días después de la semana santa y cuando la tradición cristiana recordara el lema de perdonar setenta veces siete, en un debate en el congreso de la república, Uribe Vélez, quien ha sido respaldado por los partidos cristianos como el autodenominado Colombia Justa Libres, gritó: prefiero ochenta veces al guerrillero en armas que al sicariato moral difamando 

El senador se refería a los que han dejado las armas y han entrado a la política legal, como es el caso de Gustavo Petro. Está claro, entonces, por qué sabotear la JEP (Jurisdicción Especial para la Paz) y arrinconar la protesta social, como a la oposición política hace parte de la actual estrategia gobiernista.   
  
Mientras tanto, presenciábamos la pérdida de investidura como representante a la cámara de la opositora Ángela María Robledo y de Antanas Mockus en el senado. En dos sentencias del Consejo de Estado, por lo demás polémicas, los subalternos realizaron el 25 de abril pasado un paro nacional contra el Plan de Desarrollo.  

La cosa terminó mal, según el balance de la prensa mainstream. Enfrentamientos, 17 jóvenes detenidos, destrozos en la propiedad privada y pública. Luego las etiquetas de siempre: ahí están los vándalos, los violentos, responsables del caos de la nación. Y del Plan Nacional de Desarrollo, poco o casi nada, para los 4 años siguientes.