Coyuntura Socio-Política

LA LIBERTAD DE PRENSA: 
¿CITARÁN EN INDAGATORIA AL SENADOR URIBE VÉLEZ?

Miguel Ángel Herrera Zgaib

                                                                     Para el público en general, y los participantes en los avatares de la rama judicial del poder público de Colombia, está claro que la composición de la CSJ está mutando por las últimas salidas de magistrados. Lo será más con el nuevo presidente en funciones, a partir del próximo 7 de agosto. Luego existen “afanes” explicables para resolver una  cuestión litigiosa que afecta el ejercicio de la libertad de prensa, y cuya genealogía arranca cuando menos desde el año 2006.

El centro de la cuestión tiene que ver con lo que resolverán los tres magistrados de la sala de casación penal que conocen del caso de Álvaro Uribe Vélez, por la nueva demanda presentada por Daniel Coronell contra él, alegando calumnia e injuria, a raíz de las columnas que escribió para Semana.

El trío de togados se mantiene por lo pronto, y entre ellos destaca el magistrado Barceló, quien ya había intervenido en una decisión anterior, cuando fue recurrida una decisión del Tribunal Superior de Bogotá que favoreció a Coronell, ante  la Corte Suprema de Justicia.

En el trámite actual de la demanda, el columnista de Semana, Coronel, hizo pública una carta de la autoría de Barceló, en la que apuntaba tres potenciales sindicaciones contra el expresidente, y senador reelecto. 

Ellas tienen que ver con hechos criminales ocurridos en una finca de propiedad de la familia Uribe, la Hacienda Guacharacas, cuando el senador más votado el pasado 11 de marzo, no tenía tales dignidades, por lo que es potencialmente punible, si las pruebas allegadas resultan suficientes para los falladores en la máxima instancia judicial en materia penal.

La novedad de Miami

El lunes, en la emisora W, para preguntar sobre el singular pleito fueron invitados, el demandante Daniel Coronell, y de parte del expresidente Uribe, estuvo contestando el abogado Jaime Granados, contratado por el dueño del Ubérrimo en diversas ocasiones, para asistirlo en las cortes. El anterior apoderado era Jaime Lombana, otro afamado penalista, entusiasta en el empleo recurrente de los medios masivos de comunicación.

Esta vez, la novedad estaba en un nuevo incidente que afecta a Daniel Coronell, radicado en Miami. Porque él recibió una suerte de citación de un abogado litigante ante la justicia de la Florida en problemas de migración. Éste, valiéndose de una citación judicial, conminó al periodista para que no escriba más columnas, o haga comentarios a propósito del expresidente Uribe.

El entrevistado por Julito, príncipe de la W, recordó que antes en junio de este año, con Uribe directamente intentaron hacer una conciliación, por las calumnias de que Coronell había sido blanco en la primera oportunidad, y luego, cuando Uribe tuvo que rectificarse por orden del Tribunal Superior, que éste escatimó y burló, volviendo a injuriar al periodista.

Los respectivos abogados fracasaron en la gestión de la fórmula transaccional que parara la acción penal, y/o conciliara el pleito en las actuaciones preliminares. Al no prosperar ningún arreglo, el proceso siguió, porque Uribe reclama el silencio definitivo de copropietario de Noticias Uno.

Después, en la semana anterior, Noticias Uno, anunció, sin mediación de Coronell, que está por resolverse el cierra o la  continuidad del proceso, al calificar la pertinencia de las pruebas presentadas; y volvió a calentarse el ambiente después de 12 años de dilataciones interrumpidas.

¿Cálculo de Oportunidades?

La pasada intervención en la Wradio quedó en punta, con la última palabra pronunciada por el abogado Granados. Él representa a Uribe ante la Corte, que de prosperar la demanda por calumnia e injuria, podría conducir, incluso a que Uribe Vélez pierda su curul, y que sea por primera vez objeto de una condena penal, quien ha enfrentado múltiples procesos de manera exitosa.

En el penúltimo episodio, tanto el abogado Granados como el periodista Coronell se distanciaron de hacer cualquier vaticinio sobre el cuándo conoceremos el pronunciamiento definitivo de la sala penal de la CSJ.

Ello es comprensible frente a tan espinosa materia, puesto que se ha aplazado tantas veces la calificación de las pruebas, para que la máxima instancia valore las pruebas allegadas por el periodista estrella de Semana.

Ahora bien

No es descabellado pensar que los magistrados también hicieron sus cálculos de conveniencia sobre quién sería el presidente, máxime cuando éste tiene un gran influencia en el Consejo superior de la Judicatura, entidad que elabora las listas de los magistrados futuros.

En cualquier caso, el horizonte está despejado para calificar la profusión de pruebas allegadas por el periodista calumniado e injuriado. Con la urgencia de impedir que desaparezcan más testigos de las tenebrosas acciones de la Hacienda Guacharacas, en lo cual aparece relacionado  hace un tiempo, Santiago, uno de los hermanos del expresidente,  quien según lo dicho por el mayor Meneses de la Policía, sería uno de los 12 apóstoles, cabeza de la hidra paramilitar en Antioquia.

Estamos en suspenso, conjeturando que la pasión por la verdad, y no sólo la judicial, no haya disminuido su voltaje, debido al triunfo del ahijado del poder uribista. Para que de prueba al país de su real imparcialidad el ungido por el señor del Ubérrimo. 

Así que las fuerzas del gobierno y la oposición puedan confiar en que habrá un equilibrio en materia de libertades civiles y políticas, en las altas instancias del poder público, sujetas al severo escrutinio de la opinión pública ilustrada; y a la vigilancia ilegal por parte del ejecutivo que presidió el hoy acusado de calumniador ante la CSJ.

Ultima hora

En efecto, hoy, en la tarde, Álvaro Uribe Vélez fue llamado a indagatoria, y el testigo principal contra él es Juan Guillermo Monsalve, un paramilitar, quien informó a la Corte Suprema de las actuaciones criminales adelantadas en la finca Guacharacas. 

Cuando el proceso avanzaba en la CSJ, impulsada por Iván Cepeda, intervino Juan Guillermo Villegas, un ganadero, presunto participante en el grupo 12 apóstoles, amigo del hermano del expresidente, Santiago Uribe Vélez. a quien se le grabaron las conversaciones mantenidas con Álvaro Uribe. El dice en uno de los audios que las llamadas fueron todas interceptadas por “esos hijueputas”. Anunció que renunciará al senado, y estamos a la espera que la renuncia cantada se haga efectiva.